Las actuales dominadoras del Circuito Femenino, las rivales a batir torneo tras torneo. Desde que confirmaron a finales de 2020 que unirían sus caminos de cara a la próxima temporada, los aficionados tuvieron muy claro que iban a dar mucho de lo que hablar. Pero tanto los resultados como el rendimiento que ofrecieron dentro de la pista desde sus primeros partidos, superaron con creces las expectativas más optimistas. Y es que Ale y Gemma no tardaron en demostrar que iban a imponer su dominio.
Con estilos complementarios, capaces de conseguir todo aquello que se proponen, su unión fue una decisión muy meditada. Por aquel entonces, Gemma Triay era la número 1 del mundo junto a Lucía Sainz, mientras que Alejandra Salazar era una de las principales alternativas a poner fin a su dominio, al lado de Ari Sánchez.
Al poner en marcha este nuevo proyecto, Gemma explicó que uno de los motivos por los que decidió dar ese paso fue, “Se presentó la oportunidad y decidimos aprovecharla. Ale es una persona que transmite alegría, que tiene espíritu de número 1. Es una jugadora táctica e inteligente que se caracteriza por ser valiente y letal en sus golpes de derecha”.
En 2021 conquistaron 8 títulos y se consolidaron al frente del Ranking. En 2022, ya suman 7 entorchados, con 10 torneos aún por disputar.
Un doble y espectacular refuerzo
Con más de 370 partidos y un porcentaje de victorias de más del 82%, Alejandra Salazar es una de las grandes referencias para los seguidores de este maravilloso deporte. Después de toda una vida dentro de las pistas (comenzó a los 8 años en el Club de Campo de Madrid), atesora un palmarés impresionante y es que ha sido 7 veces Campeona de España, además de proclamarse 4 veces Campeona del Mundo por Equipos, ser Campeona del Mundo por parejas y acumular más de 40 títulos en torneos profesionales. Luchadora y competitiva tanto dentro como fuera de la cancha, compaginó su faceta deportiva con la personal y se licenció en Administración y Dirección Empresarial en la UCM.
Por su parte, Gemma Triay destacó en el mundo del tenis desde que apenas era una niña y todos sus entrenadores pensaban que tenían por delante un futuro más que prometedor. Una grave lesión le obligó a colgar la raqueta y, por eso, se trasladó a Barcelona a iniciar sus estudios universitario (tiene un MBA Sport Management – Iesport)… ¡¡Quién iba a pensar que esa decisión iba a cambiarle tanto la vida!! En 2013 comenzó a jugar al pádel, en 2014 recaló en el Circuito WPT y, a partir de ahí, comenzó una trayectoria imparable. Campeona del Mundo y de Europa con la Selección Española, cuenta con 27 títulos profesionales en su haber y puede presumir de haber llegado a lo más alto del Ranking junto a Alejandra Salazar
¡We are Padel!